Gracias a Dios, éstos han sido días de mucho trabajo, razón por la que no he podido estar muy activo en mi importante tarea de escribir en este blog.
Dado que llegamos a una de las fechas más importantes del año, sobre todo para los cristianos, hoy quiero compartir contigo esta foto -que dedico a mi esposa, por tomarse el tiempo de decorar la casa cada año-.
Época de compartir con la familia y amigos. Ocasión para ver a los que están lejos y retornan para la fecha. Tiempo para celebrar que hemos sido amados de tal manera que Dios envió a Su hijo para darnos una vida mejor, eterna.
No te quedes con lo que has recibido, comparte con alguien.
Qué sientas el calor de la familia y recibas -no sólo regalos materiales, sino- mucho amor.
¡Un fuerte abrazo!