Puedes aprender a verla hermosa, con un abanico de posibilidades para trabajar y desarrollar todo su potencial, o puedes verla con pesimismo, descuido y falta de interés. No importa cuál es tu decisión, ella seguirá intentando ser el mejor albergue para tí y tu familia. Esa es mi Tegucigalpa.
Vista panorámica de Tegucigalpa, capital de Honduras
En sus calles encontrarás personas de todas las edades, esforzándose por hacer de Tegucigalpa un mejor lugar para vivir, un mejor sitio para heredar a la siguiente generación.
Hombre empujando carreta en Tegucigalpa
Igual que en cualquier parte del mundo, también encontrarás malos ciudadanos robando o cometiendo delitos, como en este caso, el joven roba la carga que llevaba el conductor de este vehículo…
Joven delincuente roba la carga a vehículo en marcha
Desde lo alto de El Picacho, imponente, como si vigilara a buenos y malos, se levanta el monumento a Cristo.
El Cristo del Picacho
Año con año, Tegucigalpa se vuelve más moderna, con edificios cada vez más altos y con esmero en su diseño, que al mismo tiempo aumentan su belleza.
Torre Alianza, moderno edificio en Tegucigalpa
A pesar de las dificultades, del descuido de los políticos que sólo ven su propio beneficio, en lugar del bien de la colectividad, hay empresarios que invierten y con ello, proporcionan trabajo a miles de habitantes.
Torre Los Próceres y otros edificios de Tegucigalpa
Si te lo propones, puedes disfrutar de su clima y la compañía de amistades, creando recuerdos todos los días.
Adultos mayores (ancianos) platicando en una banca
Aún con el creciente nivel de delincuencia, todavía se puede caminar por sus calles. Dependerá, en gran medida, de tí, disfrutar la ciudad, ver hacia arriba, hacia los lados, y sorprenderte de su belleza.
Hombre camina en una calle de Tegucigalpa
No quiero ser optimista al punto de evadir la realidad. Sé que tenemos problemas, que nos gustaría tener una mejor ciudad; sin embargo, nosotros mismos hemos elegido a quienes nos gobiernan… reflexionemos en nuestro papel al momento de votar… Tegucigalpa merece un mejor destino.
Semáforo destruido en Tegucigalpa
Hoy podemos confirmar que Tegucigalpa NO es el paraíso; pero también podemos intentar verla con otros ojos, menos pesimistas, con amor a nuestra tierra y el deseo de hacer de esta ciudad, un mejor escenario para nuestros hijos.
Contribuyamos con un granito de arena, piensa hoy mismo qué puedes hacer para que Tegucigalpa sea mejor. Olvídate de la actitud de querer recibir siempre. NO pienses en cómo te beneficias de los demás, reflexiona en tu papel constructor de una mejor sociedad.
433 aniversario de Tegucigalpa
Felicidades a Tegucigalpa y su gente, en el 433 aniversario de fundación.