He de partir diciendo que NO está mal hacer las tradicionales fotos grupales. NO está mal poner a todos a posar. Lo que digo es que aparte de las fotos que se espera obtener, intente hacer cosas nuevas, capturar esos momentos que casi siempre vemos, nos reímos, pero olvidamos documentar.
Casi siempre alguien de la familia hace cosas diferentes, locas, fuera de lo común. Siempre hay uno que se ríe raro, otro que hace muecas; nunca falta que hace chistes o piruetas, incluso, los románticos… Todos ellos son candidatos para quedar grabados en las fotos de las vacaciones.
Es importante que usted también participe de la dinámica, no se aísle, pero permanezca pendiente de esos momentos que probablemente NO se repetirán.
Para muestra, un botón 😉